domingo, 10 de agosto de 2008

Conociéndome

Hola, son las 4:29 de la tarde y doy inicio a un nuevo blog, ya que me encanta escribir testamentos como dicen todos.
Hoy deseo escribir acerca de los Juegos Olímpicos en China, la verdad es que están padrísimos, a mí en lo personal no me gustan los deportes, no lo sé, no me habían llamado la atención hasta ahora, la verdad es que se ven muy divertidos, y sobre todo que no solamente es concursar, sino ganar. Pero en esta vida tan dificil, donde la competencia es cruel para quién no está preparado, pues resulta un poco feo, bueno eso pienso.

El ver, el voleibol cuando luchaban nuestras paisanas de México contra Brasil y que perdieron, que horror, o cuando el pais anfitrión, China jugaba contra Estados Unidos en el Basquetbol y perdieron, o en la gimnasia, donde nuestra paisana se calló de la barra de 10 cm, (que loco). De igual forma cuando nuestro hermanos latinos de Argentina jugaban contra Brasil en los partidos de futbol varonil, la verdad que interesantes se me hicieron los deportes, igual y sea la emoción, pues como mencioné no me fascinan los deportes.

Que nostalgía el saber que nuestro país está luchando para ganar y la verdad que reñidas están las competencias, uno diría, si yo estuviera allí, haría esto o aquello, pero es fácil decirlo, dificil que queramos intentarlo y cobardes para hacerlo, jeje.

Pero bueno, al menos los Juegos Olímpicos me ha hecho pensar en que está haciendo nuestro país México para darle gran auge al deporte, no lo sé, pero espero poder investigarlo.

La vida, la vida son como los juegos olímpicos, hay tantos competidores hablando secularmente, laboralmente, en lo deportivo, que están dedicados a lo que les apasiona. Muchos estudian y estudian y no dejan de estudiar, cuando entran al campo laboral, están súper preparados porque tienen los conocimientos necesarios para realizar sus actividades, llegan a ser grandes empresarios o directos de empresas multinacionales e internacionales.

Ahora, en la vida cristiana, que importante es todo esto. Hace como un mes, me incribí a una página cristiana de las Asambleas de Dios y comencé una discusión sobre temas de gran interés en la juventud actual, sin embargo que verguenza, porque mis posturas bíblicas no eran lo suficientemente convincentes como para que me apoyaran, eso me hizo sentir muy mal. Había dejado de leer la Biblia y pues toma chango tu banana, no sabía nada de gramática, interpretación, ni congruencia bíblica, eso sí que me hizo sentir mal.

Así son los juegos olímpicos, los más preparados, los que saben de lo que hablan son los vencedores, pero por esa razón, hay que seguir... algún día llegaremos allí donde se hagan los Juegos Olímpicos, si es que Dios lo permite, mientras tanto a seguir viviendo en Cancún, el Paraísio de México.

Saludos y que Dios les bendiga.